La falta de tiempo es una de las quejas más comunes y por ello recurrimos a herramientas como la planificación, priorización de tareas, delegar, entre otras. Pero a veces aparece un ladrón silencioso del tiempo, el desorden. Luce muy inofensivo, pero si lo observamos con detalle es fuente de estrés y nos roba muchas horas.
Con la excusa de estar muy ocupados, colocamos las cosas en cualquier lugar, y a la hora de buscar lo que necesitamos perdemos el tiempo que no tenemos tratando de recordar donde lo dejamos. El ejemplo más común y trillado, es el de las llaves "perdidas" y que aparecen en el lugar más insólito después de un gran tiempo perdido buscándolas. Igual pasa con archivos en nuestra computadora, papeles que debemos revisar y están pendientes de aprobación, facturas, órdenes de compra y muchos casos más.
Mi invitación es ver el orden como amigo de la eficiencia porque nos permite enfocarnos en tareas que sí generan valor para nuestros proyectos y nuestra vida. El minuto que tomes para colocar las cosas en su lugar evitará que “el ladrón del tiempo” hagan de las suyas.
Si el manejo del tiempo te estresa, ¡Conversemos!
Comments